Eso se produce unas horas después de que la nueva redada violenta israelí en el campamento de refugiados de la ciudad de Yenín, en el norte de la Cisjordania ocupada, se saldara con 6 palestinos muertos y más de 20 heridos.
Las fuerzas de ocupación y colonos han intensificado sus mortíferos actos de agresión contra los palestinos desde diciembre de 2022, con Benjamín Netanyahu volviendo a tomar el timón del régimen como primer ministro a la cabeza del gabinete más derechista desde que fuera creado ilegalmente el ente sionista.
Según los últimos balances, el número de palestinos asesinados en los territorios ocupados por las fuerzas israelíes desde principios de 2023 ha aumentado a 69 y hay temores de una escalada más feroz, con el inicio del sagrado mes de Ramadán, periodo que todos los años coincide con el aumento de violencia israelí hacia los palestinos en los territorios ocupados y la asediada Franja de Gaza.